A pesar de haber sido un año extraño, el verano 2020 ha estado lleno de emociones y aventuras gracias a los que habéis confiado en nosotros.
En Pirineos hemos recorrido un buen número de “Grandes Courses” como las paredes de Gavarnie y Vignemale con Olaia, las crestas del Diablo y Costerillou con Miguel Angel y Antonio, las continuas sobas junto a Carlos (Murciélagos, Diablos Costerillou, 4 puntas del Midi), la arista de los Murciélagos con la incansable Raquel, los Infiernos junto Antonio y compañía,… Es siempre un placer acompañaros por Los Pirineos, nuestras montañas.
En Alpes también hemos podido aprovechar al máximo junto a Hugo, Álvaro, Jaime y Alberto con quienes llegamos a nuestro objetivo, el Dom de Mischabel, de la mano de Blin y su buen ambiente.
En el Monte Rosa estuvimos en dos ocasiones y pese a no hacer cumbre por la meteo, tuvimos una intensa experiencia junto con Emilien y Gilbert, originarios de Lyon.
Muchas gracias también a Zermatters, la oficina de guías de Zermatt, con la que he estado colaborando en varios programas como el Monte Rosa, el Cervino con Rubén y su gran actitud, el Pollux, el Zinal Rothorn, y el Obergabelhorn con quien pude compartir la Arbengrat con Ramon Uecker una grandísima persona, Jungfrau, Monch, ….
A demás, no sólo ha sido un verano de trabajo, sino que también ha habido tiempo para darnos un gustazo y escalar en sitios nuevos junto a Nahia y Lluc, como el Salbitschijen, el Dorado, Dammanstock, y demás paredes de los Alpes Suizos.
Aquí van algunas fotos. Que las disfrutéis!