Ya se respira otoño en Ordesa. Hay mucha menos gente, los bosques comienzan a teñirse con sus tonos anaranjados y la nieve empieza a aparecer de forma continua en las cumbres del Perdido y compañía.
Ayer nos acercamos a la Faja de Las Flores junto a Marta y Rosa, una actividad siempre agradecida, que sin ser difícil, tiene todos los ingredientes de una gran jornada montañera: 1.100 metros de desnivel, trepadas, caminos aéreos y las míticas Clavijas de Cotatuero.
Aquí tenéis unas fotos de esta mítica ruta del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido!
Un saludo!